Santos Populares de Lisboa: cómo aprovechar al máximo

Dec. 15 2023

Los Santos Populares son las principales fiestas de la capital portuguesa. Le contamos todo lo que necesita saber para disfrutar al máximo.

El mes de junio es, por excelencia, el mes de las Fiestas de Lisboa. Y esto se debe a que es el periodo en el que se celebran los Santos Populares, incluyendo San António, el patrón de la capital, pero también San Juan y San Pedro. Los días de las celebraciones son, respectivamente, el 13, 24 y 29 de junio, pero durante todo el mes es posible recorrer la ciudad, observar las decoraciones típicas y participar en las verbenas de cada barrio.

Hay muchos símbolos asociados a esta época: desde las albahacas a las sardinas; de las marchas a la música popular, pasando por los trajes y decoración simbólica. En Lisboa, la celebración del patrón de la ciudad va más lejos, incluyendo también las bodas de San António, en alusión a su fama de casamentero.

La noche del 12 de junio es el punto álgido de las celebraciones, por lo que lo ideal para quien quiere participar es llegar unos días antes. Si quiere disfrutar de las fiestas de cerca, el hotel Solar do Castelo le ofrece una ubicación privilegiada. Le permite salir a pie para recorrer varios barrios de la ciudad o quedarse cerca del Castillo y unirse a las multitudes que esa noche se concentran en este monumento.

Gente en las calles de Lisboa el 12 de junio


4 símbolos de los santos populares y lo que significan

Esta es una época rica en simbolismo, pero no siempre el significado de los símbolos es evidente para quien participa en las fiestas. Siga leyendo para conocer la historia de cuatro símbolos característicos de los santos Populares de Lisboa.

1) Sardinas asadas con pan

Sin lugar a dudas: quien sale a vivir los Santos Populares va a comer sardinas asadas, preferentemente con pan. También puede pedir un caldo verde, una sopa típica de col cortada fina, con caldo de patata y una rodaja de chorizo.

Deliciosas sardinas a la plancha sobre pan tostado

La tradición de comer sardinas asadas por los Santos Populares empezó en Lisboa y, más tarde, en la década de los años 40 del siglo XX, se expandió al norte. En el libro Culinaria Portuguesa (Olleboma, 1936), la época de las sardinas se registra de mayo a octubre.
La tradición de pescar sardinas en esta época, aliada al carácter popular de las fiestas explica que este pescado sea una de las estrellas de las celebraciones: a finales del siglo XIX y principios del siglo XX, los pescados grandes se destinaban a las mesas más pudientes, y los pequeños, a los platos más modestos.

2) Albahaca con versos populares

Santo António, Santo António / San António, San António
Que bonito que tu és / Que bonito eres
Vou comprar um manjerico / Compraré una albahaca
E vou pô-lo a teus pés / y a tus pies la pondré

No es fácil encontrar respuestas sobre cuándo y cómo la albahaca, de la familia del basílico, se convirtió en el símbolo de los santos populares. Es cierto que esta planta aromática, conocida como “hierba de los enamorados”, simboliza el amor y, regalar una maceta, puede ser un símbolo de amor efímero, teniendo en cuenta que es una planta con un ciclo de vida corto.

Los aromáticos tarros de albahaca con canciones populares

El hecho de que sea una planta aromática también le atribuye una excelente ambientación en el contexto de los santos Populares: su aroma agradable que, según la sabiduría popular, sólo se debe oler indirectamente, pasando la mano por sus hojas pequeñas y ovaladas, también puede tener un efecto repelente de insectos.

3) Marchas populares

Todos los años, cada barrio de la ciudad prepara una marcha para el desfile anual de las Marchas Populares, que tiene lugar la noche del 12 de junio en la Avenida da Liberdade. A lo largo de todo el año, un equipo de cada barrio se dedica a organizar un grupo que presentará públicamente: música y letra; coreografía y vestuario. La fiesta, transmitida en directo en televisión, desprende una alegría contagiosa. Cada barrio elige a un padrino y madrina para su marcha, normalmente personajes públicos, para que su creación alcance mayor visibilidad. Los ganadores, elegidos por el jurado, se anuncian al final de la noche.

Marchas Populares en la Avenida Liberdade el 12 de junio

La tradición se remonta a 1932, cuando se organizaron las primeras marchas populares oficialmente en Lisboa. Se han convertido en un símbolo de la capital a tal escala que protagonizan algunas escenas de la película Canción de Lisboa (Cottinelli Telmo, 1936). El hecho de que estuvieran asociadas al régimen dictatorial, llevó a su interrupción tras la Revolución del 25 de abril de 1974, aunque regresaron en 1980.

4) Bodas de San António

San António, el patrón de Lisboa, también conocido como el “santo casamentero”, ha dado lugar a abundantes historias sobre personas que han encontrado el amor gracias a su ayuda. Por ejemplo, según una tradición portuguesa del siglo XVII, una mujer desesperada por encontrar marido lanzó por la ventana su estatua de San António, alcanzando a un soldado que pasaba por la calle en aquel momento. Se cuenta que, después de que ella lo auxiliase, el soldado se enamoró y se casaron.

San Antonio, el santo casamentero de Lisboa

Aprovechando la fama del patrón, el Ayuntamiento de Lisboa organiza todos los años las Bodas de San António. Se seleccionan 16 parejas para que se den el “sí quiero” el día 12 de junio y luego terminan el día desfilando en la Avenida da Liberdade, integrando una tradición más de los Santos Populares. La ceremonia se divide entre la Catedral de Lisboa, para las bodas religiosas, y el Salón de Recepciones de la Casa Consistorial, en el caso de las bodas civiles. La primera edición tuvo lugar en 1958, en la Iglesia de San António, uniendo a 26 parejas. La iniciativa se vio interrumpida con la Revolución de 1974 y se retomó en 1997.

Ahora que ya conoce con detalle la época más festiva de Lisboa, esperamos que se anime a vivirla en primera persona. Opte por usar ropa fresca y calzado confortable, ya que lo habitual es recorrer varios barrios de la “Ciudad de las 7 colinas”. En el caso de que prefiera comenzar la noche en la Avenida da Liberdade, subir al Barrio Alto y a la Bica y visitar el Castillo o hacer el recorrido inverso, los Lisbon Heritage Hotels tienen una opción de alojamiento para usted.

Si prefiere un ritmo más tranquilo y sin multitudes, puede optar por pasear durante el día. En los barrios se mantiene la animación y tenemos la posibilidad de probar los sabores y aromas de los santos Populares en una versión más familiar e igualmente alegre. En este caso, no se olvide de llevarse un sombrero y el protector solar: el calor aprieta a esas horas del día.