Lisboa Pintoresca – 8 enclaves turísticos que no debe perderse
Apr. 12 2022
¿Está planeando viajar a Lisboa y teme perderse alguno de los lugares más especiales de la ciudad?
Como no queremos que esto le suceda, le presentamos 8 sugerencias de quien conoce como nadie los secretos del Castillo de São Jorge, para que disfrute de lo mejor que Lisboa tiene para ofrecerle. Y, por supuesto, tampoco se pierda las mejores vistas desde los diversos miradores que le proponemos visitar.
Una de las mejores formas de disfrutar de Lisboa es caminando, sin complicarnos con el tráfico del centro histórico de la ciudad, de difícil acceso. De igual forma, evitaremos estar consultando continuamente el mapa y hacer rutas predefinidas, dejándonos llevar por las sinuosas calles. Lo que interesa es el viaje y no el destino y no todas las ciudades tienen esta peculiaridad de ofrecernos en cada rincón, detalles y pormenores que no siempre aparecen en las guías turísticas.
Si lo que está buscando precisamente es una experiencia única de alojamiento en Lisboa, aproveche para conocer el Solar do Castelo, el único Hotel dentro de la muralla del Castillo de São Jorge ¡y, donde podrá ver pasear a los pavos reales del castillo en su jardín interior de forma habitual!
Solar do Castelo – Los lugares más pintorescos para conocer a pie
1. Barrio de Alfama – El Corazón imperfecto de Lisboa
Callejuelas y recovecos sin fin. Un encantador empedrado serpenteante, enemistado con los tacones, repleto de casas típicas alrededor del Castillo de São Jorge. El barrio de Alfama es uno de los más inconfundibles y visitados de Lisboa y, también, donde es más fácil perdernos por sus laberínticas calles estrechas.
Aquí es habitual ser meros espectadores de las escenas cotidianas reales y oír conversaciones entre vecinos, que casi siempre hablan demasiado alto, o bien, podemos observar disimuladamente la vida de sus comercios, pequeños negocios familiares. Y el fado, siempre el fado presente, melancolía que atrapa nuestra alma. Alfama es un sentimiento, reflejado en las paredes inclinadas de este barrio, corazón de Lisboa.
2. Panteón Nacional – Personalidades famosas de Portugal
Mucha gente no lo sabe, pero este monumento tardó cuatrocientos años en ser inaugurado. No fue hasta 1966, fecha en que, asimismo, entró en funcionamiento el puente que une las 2 orillas del Tajo, entre Lisboa y Almada.
En la nave central del Panteón existe un memorial que evoca a los grandes nombres que han quedado asociados a los descubrimientos de Portugal, incluyendo al poeta Camões. También se pueden visitar las salas de los sepulcros con los restos mortales de personalidades famosas, como antiguos presidentes de la república o escritores, entre otros. Si se encuentra abierta al público, aproveche para visitar su terraza, que ofrece una vista única de la ciudad y del río Tajo.
3. Catedral de Lisboa – Historia casi milenaria
La Catedral, sede del Patriarcado de Lisboa, es la iglesia más antigua de la ciudad y fue construida durante el reinado de D. Afonso Henriques tras la reconquista de Lisboa a los árabes en el siglo XII. La mayor parte de su acervo está conservado en museos, como el Museo de Arte Antiguo, pero la Catedral también incluye una colección visitable, el Tesoro de la Catedral Patriarcal. No deje de visitar el interior de este monumento y admirar su enorme y bello rosetón.
4. Fundación Ricardo Espírito Santo – Un viaje a las artes antiguas
Visitar este Museo es realizar un viaje al pasado de las Artes Decorativas del s. XV al s. XVIII, en áreas tan distintas como: Mobiliario, Textiles, Platería, Porcelana China, Loza Portuguesa y Azulejos, Pintura, entre otros.
Asimismo, en el Museo de Artes Decorativas Portuguesas, encontrará a su disposición una acogedora cafetería en un patio repleto de historia, donde podrá hacer una pausa durante su paseo por Lisboa.
La entrada a la Fundación es gratuita, gracias a la oferta cultural que los Hoteles Heritage facilitan a sus huéspedes
5. Mirador de Portas do Sol – Un balcón enladrillado con vistas al río
Es uno de los lugares más visitados de Lisboa, ofreciendo una de las mejores perspectivas de la ciudad y del enjambre de casas de la colina de Alfama ¡nos permite divisar hasta donde la vista alcance! Es un enclave fundamental del casco histórico lisboeta, rodeado de monumentos emblemáticos, como el Panteón Nacional o el Castillo de São Jorge. Este mirador pavimentado con ladrillos anaranjados se alza como un balcón sobre el río.
6. Mirador de Graça – La puesta de sol perfecta
Another viewpoint not to be missed is the Miradouro da Graça, which has a breath-taking panoramic view and allows us to Otro de los miradores imprescindibles es el mirador de Graça, cuya vista panorámica nos dejará sin respiración, ya que nos permite contemplar desde el Castillo de São Jorge hasta el río, así como desde el barrio de Mouraria a la Baixa Pombalina. Un paisaje salpicado por los colores de las casas, calles y jardines a nuestros pies y el ajetreo de la ciudad, atenuado por la infinidad de lugares que intentamos descubrir con nuestros propios ojos. Una buena forma de subir a este mirador es montándose en el tranvía 28, y después puede aprovechar para regresar a pie.
7. Gastronomía – Nostalgia cantada con el plato
Lo que no falta en los barrios de Alfama y del Castillo es una variada oferta de pequeños restaurantes con platos típicos portugueses. Aquí también encontrará las casas de fado más antiguas, que incluyen espectáculo durante la cena. Prepare su paladar para comer por primera vez unos “pescaditos del huerto” (judías verdes rebozadas) o unos pasteles de bacalao con arroz de tomate, sin olvidar las sardinas o jureles asados con una ensalada de pimientos. Probablemente, sus paseos por la ciudad le hayan despertado el apetito, así que es el momento de probar el arroz de pato, el bacalao dorado (a la Brás) o el famoso cocido a la portuguesa.
8. Transportes – A pie o en tranvía
Estas rutas se caracterizan por sus abundantes cuestas. Lisboa, tal como Roma, tiene 7 colinas y la mejor forma de disfrutar de la ciudad es utilizar un transporte público para las subidas, y bajarlas tranquilamente caminando y apreciando las vistas del río y los detalles que surgen en cada esquina. Al hospedarse en el Solar do Castelo no tendrá que preocuparse, porque los desplazamientos en el Tranvía 28 son gratuitos y quedan por nuestra cuenta. El 28, como le llaman los lisboetas, pasa por los mejores enclaves de la ciudad, a lo largo de un trayecto único que recorre los estrechos barrios históricos de Lisboa.
Esta oferta está incluida en las reservas directas de Solar do Castelo.
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